King Arthur
Direcci?n: Antoine Fuqua.
Pa?ses: USA, Irlanda y Reino Unido.
A?o: 2004.
Duraci?n: 130 min.
Reparto: Clive Owen (Arturo),
Keira Knightley (Ginebra),
Stellan Skarsg?rd (Cedric), Stephen Dillane (Merl?n), Ray Winstone (Bors), Hugh Dancy (Galahad), Til Schweiger (Cynric), Ioan Gruffudd (Lancelot), Mads Mikkelsen (Trist?n), Joel Edgerton (Gawain),
Ray Stevenson (Dagonet), Sean Gilder (Jols).
Argumento: Arturo es un guerrero romano que vigila las fronteras del imperio. Su mayor deseo es volver a Roma. Bajo su mando sirven varios caballeros de nombres evocadoramente legendarios, muchos de ellos reclutados de las tribus s?rmatas, que tienen obligaci?n de facilitar un miembro de cada familia para las milicias. Uno de ellos ser? Lancelot.
Cuando los sajones amenazan con invasi?n, Arturo deber? hacerle frente al rescate de un notable romano a cambio de la libertad de ?l y de sus hombres, que tambi?n desean licenciarse.
Comentario: En principio un tema atractivo para esta pel?cula que no da la talla ni como recreaci?n del mito art?rico ni como pel?cula hist?rica. Seg?n la publicidad, se trataba de contar la "verdadera" historia del rey Arturo, como si eso lo supiera alguien. El resultado es una obra p?sima, horrible y asquerosamente mal dirigida, que aburre a las piedras, no cuenta nada y cuyo ?nico atractivo es un grupo de actores guapos y unas cuantas batallitas no demasiado lucidas. Porque el problema no es tanto el no ce?irse al mito que todos conocemos, y del cual se limitan a tomar los nombres (no se puede decir que unos guerreros s?rmatas se llaman Lancelot, Galb?n, Trist?n y dem?s y que no quede extra?o y rid?culo); sino m?s bien el que no han sabido encontrar una historia adecuada o m?s bien un argumento suficientemente atractivo para exponerla.. Porque si al menos tuviera eso, obviariamos esa mezcla entre la historia legendaria y la supuesta realidad, que se queda a medio camino en ambos casos provocando insatisfacci?n al ver a un Merl?n, l?der dru?dico de unos salvajes y una Ginebra, casi pis?ndole el terreno a Xena, la princesa Guerrera. Esta pel?cula no tiene ni la magia de la leyenda ni el rigor hist?rico suficiente para ser desmitificadora.
Ginebra guerrera
Los guerreros s?rmatas
Por otro lado, la historia de amor es sosa de morirse, casi inexistente. En todo el metraje de la pel?cula debe de haber apenas una breve escena de interacci?n entre Ginebra y Lancelot. Y entre ella y Arturo, a?n menos. Adem?s, contado todo sin pasi?n ni ganas. Qu? diferencia con la tragedia del mito.
Arturo y Ginebra, o eso dicen...
Para un beso que se dan... tenemos que ponerlo.
El ?nico posible atractivo que presenta esta pel?cula es la acci?n. Las escenas de batallas, y todas esas cosas. Aqu? las hay para aburrir, y nunca mejor dicho. Destaca la batalla celebrada sobre el hielo, con alg?n destello de inter?s, pero el resto es muy poco llamativo. En algunas cosas recuerda a Braveheart. Ni siquiera es original. Las batallas, como suele suceder en este tipo de historias, son demasiado largas, y llenan el espacio que deber?a estar reservado a la historia.
Mucho fr?o; estos no hacen un menage a trois ni de broma
En el aspecto t?cnico, tampoco es nada del otro barrio. A decir verdad, parece un telefilme. La realizaci?n televisiva de miniserie lastra la acci?n hasta extremos exasperantes de lentitud. Es toda una haza?a ver la pel?cula hasta el final. Como curiosidad, el productor es Jerry Bruckheimer, el de Piratas del Caribe, que ten?a la espantosa idea de cederle la direcci?n del bodrio nada menos que a Michael Bay (La Isla, Armaged?n). No quiero ni imaginar lo que hubiera salido de tal dislate. Un Arturo desmelenado apenas entrevisto en un montaje de mil tomas por segundo. Aunque quiz?s hubiera sido menos aburrido, y podr?amos re?rnos m?s. Porque la pel?cula, para colmo, es seria, solemne, oscura y neblinosa. Bueno, los malos tienen su gracia... a veces.
Malos hasta decir basta
Clive Owen,como Arturo, est? bien, aunque la verdad, el personaje no da para mucho.